jueves, 1 de diciembre de 2011

Discapacidad y currículo

Hoy he leído, estar al paro y tener tiempo libre te permite ese tipo de lujos, un post que viene a decir que los profesionales de recursos humanos se toman una media de 20 segundos para descartar o elegir un currículo durante la selección de personal que realizan para cubrir un puesto determinado.
Resulta un poco frustrante pensar que toda tu vida formativa y laboral, reflejada en uno o varios folios, si utilizamos el cada vez más en desuso formato papel, es valorada en esos escasos 20 segundos.
Todo el interés que los candidatos se toman, o nos tomamos, por diseñar, maquetar, resumir, condensar nuestros conocimientos y capacidades, además de nuestra poca o mucha experiencia laboral, de un modo lo más completo y atractivo posible para que al final, de un simple vistazo se nos elimine o elija, permitiendonos seguir hasta la siguiente criba de currículos en la que otros 20 segundos, ojo! que ya se han fijado en nosotros al menos 40, decidan nuestro futuro profesional a corto plazo.
Y lo peor de todo es que no me parece mal. Es decir, tenemos 5 millones de parados, al menos oficiales, y las empresas que están creando empleo son pocas y en ocasiones contadas. Esto hace que cuando una de ellas publica o da a conocer una vacante en su plantilla, además de sonar todas las campanas como en aquellas fiestas grandes de los pueblos, el aluvión de currículos que les llega debe ser sencillamente descomunal. 

http://azulcafe.mx/

De ahí que los encargados de realizar esa selección tengan que cortar por lo sano. Es decir, y que nadie se tome esto en serio porque espero que no sea el modus operandi de los departamentos de recursos humanos de nuestro tejido empresarial: sí los candidatos no son rubios, altos, guapos y con ojos azules quedan descartados directamente. De este modo te quedas con una pequeña cantidad de aspirantes que cumplen todos tus requisitos marcados en la oferta y otras trescientas cincuenta facetas más que me voy ideando por el camino porque por algún lado hay que descartar.
¿A que viene todo este rollo que estoy soltando? Pues muy simple. Las personas con discapacidad tenemos una tasa de paro tal que el 21% de desempleo actual a nivel español es una cifra casi cómica en relación con la que sufre el colectivo. Aun y con eso, algunos no desfallecemos y a pesar de llevarnos más palos que el pobre Piqué por provocar la amarilla para jugar el clásico, cuando vemos una oferta que creemos que se ajusta a nuestro perfil ahí que mandamos el currículo.
Está claro que ahora lo que sobran son candidatos, y que en la calidad de nuestro currículo nos jugamos buena parte de nuestra posible empleabilidad e inserción laboral, con lo que eso significa de autorrealización, sentirse parte activa del sistema, no estar pendiente de sí el político de turno va a decidir congelar o aumentar las pensiones de las que vivimos casi todos, en fin, de ser dueño de tu vida y decidir sobre ella.
Por eso, y no es la primera vez ni seguramente será la última que lo he dicho, la formación resulta clave en todo este puzzle de ofertas-currículo-selección-contratación para las personas con discapacidad.

http://www.inpformacion.com/index.php

Las personas con diversidad funcional tenemos bastante complicado entrar en el mercado laboral, personalmente creo que salvo los discapacitados que opten por el autoempleo y los pocos que entran al empleo protegido en sus diversas variantes, el resto del colectivo tiene, más bien tenemos, una larga travesía en el desierto del desempleo hasta que alcancemos algún pequeño oasis llamado trabajo, que será precario y no colmará nuestros sueños ni expectativas, pero nos dará una nómina a fin de mes, que en estos tiempos que corren no es poco.
Debemos reducir, más pronto que tarde, la brecha formativa que tiene el colectivo de personas con discapacidad. Eso permitiría al menos que nuestra candidatura a un puesto compita en igualdad de condiciones, en relación con los conocimientos de los demás candidatos, y ya serán otros aspectos como la experiencia, las barreras arquitectónicas o las tan conocidas "barreras mentales" las que influyan en nuestro acceso al empleo

http://arrobamedica.wordpress.com/

Por nosotros que no quede.